lunes, 22 de mayo de 2017

Hasta pronto emocionArte

¡Buenos días mis queridos emocionArtes!

La asignatura se acaba aquí. Creó que no soy la unica que ayer, en la última clase de Educación Artística sintió nostalgía. Han sido unas clases muy diferentes a lo que estamos acostumbrados. Al principio de la asignatura, debo decir que me sentia desorientada, ya que Pilar no nos daba unas pautas fijas, apuntes o unos criterios fijos de evaluación. Pero poco a poco me he ido amoldando, me he ido acomodando. 

Esta asignatura me ha hecho conocer más gente, abrirme a mis compañeros y vivir momentos de autentica risa. Me quedó con todos esos minutos de adrenalina en los bailes (taller que me ha encantado), con el momento que me libere de las barreras de las líneas y comence a pintar con las manos y acabé con todo le cuerpo manchado de tempera (al igual que Patricia), con todo lo que he conseguido descubrirme, con el hecho de haber sido capaz de compartir con mis compañeros mi pasado (video final) y sobre todo con mi nuevo amigo: Mi cuaderno de los sueños.

Para mí, ayer fue un día muy emotivo. Muchos de los vídeos de mis compañeras me emocionarón, aunque también debo decir que soy de lagrima fácil. Significa mucho para mi que la mayoría de nosotros hemos sido capaces de mostrar un pedazito de nuestro interior, ya que lo interpreto como que somos un gran grupo, que confiamos los unos en los otros y sobre todo que empatizamos. 

Por último decir, que el último baile, bajo mi punto de vista, ha sido el mejor. Lo he interpretado como un hasta luego, pero no hasta nunca. No ha sido una despedida, porque pienso que todos creemos en una educación así, que incite a la reflexión interior y por ello, me gustaría volver a vivir de nuevo una asignatura de esta forma o el día de mañana conseguir unas clases reflexivas a la par que educativas. 

Ha sido un placer, poder compartir todos mis sentimientos y descubrimientos con todos vosotros, y sobre todo, dar las gracias a el gran grupo que formamos todos y cada uno de los alumnos de esta grupo 161. 

Un placer, nos vemos pronto.

Laura Romero Chicote

domingo, 21 de mayo de 2017

HOY EN EMOCIONARTE... STOP HOMOFOBIA

Bueno días mis emocionartes:

Hace unos días se celebró el día internacional contra la homofobia, entendiendo homofobia como " aversión obsesiva contra hombres o mujeres de diversidad sexual y las que mantienen hábitos o actitudes comúnmente asociados al otro sexo".

Homofobia se compone de homo- (igual o semejante), -phobos- (temor, odio) e -ia (acción, cualidad), pero como dijo Morgan Freeman "Odio la homofobia. No es una fobia, usted no tiene miedo, usted es un imbecil".

Cada vez es más fácil ver una pareja, ya sea homosexual, bisexual, transexual o como sea, y es estupendo. Llevamos tantos siglos ocultando el amor que no nos damos cuenta de que no existe ninguna diferencia entre unos y otros.





Bueno sí, el amor se diferencia en los ojos con los que se miran por todo lo demás da igual. Y esa tendría que ser la filosofía a inculcar en las escuelas, y ese trabajo empieza por nosotros/as.



Iris Rabanal Casero

sábado, 20 de mayo de 2017

HOY EN EMOCIONARTE... EL MIEDO AL FRACASO


Buenas noches compañeros/as, ésta semana que entra es la última en la que tendremos que examinarnos (al menos por el momento) y a día de hoy y después de llevar toda una vida, desde el colegio, haciendo exámenes me sigo preguntando: ¿Por qué nos provoca un miedo tan extremo el hecho de examinarnos? Pues bien os confieso que yo retengo mejor la información cuando no me examinan de ésta, porque trato de comprender las cosas y no de memorizarlas, por tanto mi interés real sobre los conocimientos aumentan. Creo que desde pequeños tratan de acostumbrarnos a la presión, el agobio, las calificaciones numéricas y el hecho de poner un número al esfuerzo realizado durante todo un curso, mediante una prueba escrita en la cual no plasmamos ni el 20% de lo que hemos aprendido.

Pienso que realmente los exámenes me dan auténtica fobia. El protocolo de; entrar en el aula, separar las mesas, mantener el silencio, tener una hoja y mirar solo hacia ésta, hace que mi inseguridad aumente hasta el punto de que me suden y tiemblen  las manos, que tenga ganas de vomitar o que me olvide de todo lo que me sabía una hora antes de entrar en el aula.
Este tipo de enseñanza “prehistórica” me parece totalmente fuera de lugar, ya que durante el curso todos los profesores nos hablan de la motivación que debemos transmitir a nuestros futuros alumnos y que debemos respetarles y tratar de no calificar su esfuerzo con un absurdo número, pero llegada la hora de la verdad ellos siguen poniéndonos esos exámenes que nos hacen pasar meses de estrés y de replantearnos muchas cosas. 
He visto a gente “quedarse en el camino” y no lograr terminar el instituto o la universidad porque sus nervios les traicionaban a la hora de examinarse, a pesar de ser, personas con ganas de aprender y comprender cada asignatura. Esto último me parece realmente triste, pues en muchas ocasiones, los exámenes los aprueban aquellas personas que sí que se desenvuelven bien ante el tipo test, por ejemplo, o que con leerlo una vez ya son capaces de plasmarlo, aunque tras el examen se les olvide.
No sé porque  nos cuestionamos el porqué del fracaso escolar o a la frustración, por no hablar del famoso TDH (en mi opinión inexistente), si ya desde primaria a los niños les hacen sentir más o menos listos en función de cómo les salgan los exámenes, haciendo que su nivel de estrés sea constante y que su autoestima disminuya y el miedo aumente. Por otro lado están los padres, exigentes como los que más con respecto a las calificaciones numéricas de sus hijos, sin darse cuenta de que atosigando de esa manera solo consiguen que el niño no se sienta valorado o se crea que es torpe o menos listo. Todo parece una cadena de montaje, en la que como siempre las emociones han de quedar fuera, y es ahí donde brilla por su ausencia la calidad humana. No entiendo en que momento nos hemos vuelto tan “locos” con el tema de las calificaciones, como hemos podido llegar a pensar que el esfuerzo, la perseverancia o la inteligencia se mide dentro de unos parámetros del uno al diez, sin tener en cuenta todo lo que rodea a esa adquisición de conocimientos y sin incentivar lo más mínimo un interés real por aprender.


En un “democrático” S.XXI seguimos utilizando una vara de medir desmesurada y antiquísima, tratando de crear niños tipo y robando la inocencia y la infancia a todos aquellos niños que se sienten menos listos por tener menos calificación. Seguimos centrándonos en “¿Qué has sacado?” en vez de “¿Qué has aprendido?”, quitando valor a lo que debería representar la escuela (templo de saber y  de las oportunidades de descubrir), tal vez algún día introduzcamos las emociones en el aula, desde infantil, y dejemos de un lado las calificaciones numéricas y los densos y duros exámenes, que tanta frustración generan.

Cristina Díaz Pescador

viernes, 19 de mayo de 2017

HOY EN EMOCIONARTE... DISNEY

Buenas mis queridos emocionartes:

¿Quién no ha visto durante su infancia una película Disney con toda la inocencia que eso conllevaba? Walt Disney es una de las personas más conocidas mundialmente y que más sueños a impulsado en las infancias de niños de todas las edades. Pero los sueños sueños son, y no todo es como lo pintan.

Hace un tiempo tuvimos una charla muy interesante impartida por Judit García Cuesta sobre otra forma de ver los cuentos partiendo de la cultura visual. 

Sin darnos cuenta diariamente nos encontramos bombardeados por imágenes: publicidad, marquesinas, whatsapp, televisión, periodico, cuentos, etc. Y pasamos por las imágenes sin pararnos a pensar realmente lo que nos están queriendo decir. 

Pero parémonos a pensar en nuestra carrera, la de cuentos que pasarán por nuestras manos y lo importante que es que nos fijemos en que valores estamos promoviendo. Las famosas historias Disney, enfocadas supuestamente a los adultos en realidad provienen de los cuentos de los hermanos Grimm que estaban prohibidos por la iglesia y que estaban recomendados para adultos... ¡PARA ADULTOS! 

Creer que contar las historias Disney sin pararnos a reflexionar lo que se tratan en ellas, es un error. Por mucho que las familias se empeñan en rebatir esta idea argumentando "Nosotros las vimos y no salimos tan mal".

Por ello, el trabajo con las familias es fundamental, el mostrarles diferentes materiales con los que puedan compartir un momento lúdico con sus niños y niñas. Hacer hincapié en que es necesario no solo ver con ellos películas o cuentos, sino saber, desde una opinión crítica, lo que los más pequeños han entendido. 

Durante la charla se trataron temas como: el sexismo, el concepto de belleza, el simbolismo de los colores y de los objetos, el sexo, el alcohol o los mensajes subliminales entre otros.

Algunos de los temas, no son apropiados trabajarlos con las edades con las que vamos a trabajar como pueda ser el sexo. Pero los conceptos de belleza, que se encuentra en cualquier lugar, es fácil y les ayuda en un futuro a no preocuparse tanto de los canones establecidos por la sociedad. 

¿Porqué la belleza solo está en una mujer que está delgada y tiene el pelo largo o en un hombre que está musculado y tiene el pelo corto? Actualmente existen muchas más personas con tallas normales como la 40, que personas que utilicen una 34. La realidad es que hay personas más delgadas que otras, igual que hay personas con un pelo más bonito que otras o personas con una belleza mayor que otras. El problema es que todo esto depende de las industias más fuertes, como Disney, que nos enseña que para ser feliz tienes que estar delgada, tener un principe, una casa enorme y comer perdices. Pero la realidad no es así.

Con esto quiero decir, que no todo lo que nos dicen es verdad y quizás los cuentos guardan otro fondo como el poema de David Martínez Álvarez que aquí debajo comparto:

PRINCESAS
"Érase una vez...
una Cenicienta 
en objetos perdidos,
con sentimiento encontrados y pies planos,
una Blancanieves que tenía
delirios de grandeza, 
se buscaba en los espejos
y le crecían los enanos,
una Aurora que soñaba despierta
y sus sueños padecían de insomnio,
una Ariel a la que le bailaban el agua,
no se ahogaba en los charcos
ni veía en vaso medio lleno 
o medio vacío: lo llenaba,
ni una Bella sin pelos en la lengua
que nunca dejaba que ningúna bestia
le levantara la mano,
una Jazmín con mal genio
que deseaba liberar al diccionario
del término "inhumano", 
una pocahontas que se alejaba
de las filas indias de Ikea o Primark
y que no vivía el sueño americano,
una Tiana a la que, aunque la vida
le salió rana, nunca dejó de besarla,
una Rapunzel que se soltó la melena
cuando intentaban que no saliera de casa
y una Mulán que no se creía
ninguno de estos cuentos chinos
porque las mujeres que no son 
como las pintan son como ellas quieren, 
pero hay algunas de ellas que no quiero
volver a ver ni en pintura...
Y fui feliz.

Iris Rabanal Casero

miércoles, 17 de mayo de 2017

HOY EN EMOCIONARTE...ACOSO ESCOLAR

Buenas mis queridos emocionartes:

Hoy venimos a hablaros del acoso escolar, este es un tema que, por desgracia, sigue ocurriendo de forma muy activa en todos los centros educativos de nuestro país. Es un problema complicado y que nosotros, como futuros docentes, debemos intentar evitar, y una de las mejores formas es educar en valores y emociones.

Todas estas historias que hemos visto en el aula no ocurren de manera aislada, sino que son hechos cotidianos que se dan en los grupos sociales que se forman dentro de los propios sistemas educativos, donde supuestamente los valores básicos deberían estar continuamente presentes.

Desde muy pequeños comenzamos a entablar relaciones sociales, llegando a ser una parte fundamental en nuestras vidas, por ello se crean estos grupos donde los “más fuertes” deciden quienes son aquellas personas válidas y cuáles no. Por ello muchas personas no dan su punto de vista ni sus opiniones, para poder así pertenecer a un grupo, llegando a no actuar ante un claro caso de “bullying” por el miedo a sufrir esa exclusión social.

Considero que la intervención educativa es fundamental para acabar con estos casos de acoso escolar, y el profesor tiene un papel fundamental dentro del aula. Debemos ser capaz de observar e interactuar con los niños, interesándonos por todo aquello que les rodea para poder detectar cualquier indicio o situación que pudiera desembocar en maltrato infantil.
Mateo Bueno Abogado

También se deben trabajar valores fundamentales como la igualdad, la tolerancia, el respeto, la cooperación, la empatía, la amistad… ya sea a través de actividades o situaciones cotidianas que conlleven estos valores.

Nosotras como futuras educadoras de educación infantil debemos promover y fomentar estos valores, ya que desde temprana edad se pueden trabajar para que los vayan adquiriendo tanto en el ámbito escolar como en la familia, ayudando a desarrollar su propia personalidad.

Es duro pensar cómo se puede permitir que un gran número de niños sufran este acoso, que en muchos casos ha llegado al suicidio. Considero que, aparte de nuestra función como educadores en el aula, los sistemas educativos deberían reflexionar y tomar medidas sobre estos casos, que parece que cada vez son más frecuentes.

Andrea Acevedo González

domingo, 14 de mayo de 2017

HOY EN EMOCIONARTE... LA INCLUSIÓN SIEMPRE ES LA SOLUCIÓN


El pasado mes de diciembre uno de nuestros profesores, de la universidad Autónoma,  nos propuso participar en un proyecto de integración social y sin pensármelo me apunte junto con cuatro compañeras de clase, que decidieron finalmente hacerlo sobre otros ámbitos.
En esta entrada voy a explicaros en que ha consistido el proyecto y a animaros para que participéis en él o en otros diferentes más adelante. El proyecto como tal es denominado ApS (aprendizaje y servicio) y en él  salen favorecidas las dos partes: los que ayudan a otros (al sentir satisfacción, aprender algo nuevo y comprender mejor determinadas situaciones sociales) y los que son ayudados (al no sentirse solos, sentirse integrados en la sociedad y valorados). Este tipo de servicio lleva muchos años llevándose a cabo y su origen dentro de las universidades se inició en Estados Unidos.

Un ejemplo claro de Aps sería el siguiente: Si un grupo de estudiantes, por ejemplo de química, recogen residuos de determinadas zonas, los llevan al laboratorio, los estudian y sacan en conclusión lo perjudiciales de estos y tras ello regresan a la zona de recogida, para advertir a los vecinos de la gravedad de dichos residuos y la manera de evitar que estos se acumulen allí; entonces estarán dando un servicio a la comunidad, al recoger dichos residuos y posteriormente estarán aprendiendo, entre otras cosas, las consecuencias y componentes de dichos residuos, avisando además a los vecinos.

Mi labor en este proyecto de ApS, en un principio, era el de dar clases de español a mujeres y a hombres provenientes de otros países (que desconocen el idioma y la cultura). Lo cierto es que los días previos al comienzo de estas clases los nervios estaban a flor de piel y aunque me considere una persona tolerante, los prejuicios habían calado tanto en mí que pensaba que al ser yo de diferente cultura a la de ellos no resultaría sencillo que tuviesen confianza en mí. Las clases las realizaba en la localidad de Leganés, donde se imparte español en varios centros a todas aquellas personas que quieran o que lo necesiten.

Desde el primer día todo fue más que bien. Las mujeres me aceptaron como a una más y se me permitió dar las clases utilizando la metodología que más adecuada considerase. A nivel académico he realizado un aprendizaje brutal, pues he sido capaz de llevar parte de mis conocimientos teóricos al aula y de darme cuenta de que la mayor parte de la teoría que se estudia en la carrera no se asemeja a la realidad.
 Las mujeres eran mayores de veinticinco años y cada una tenía una edad diferente. Desde el primer día las mesas se dispusieron en círculo y en ningún momento me senté en una mesa diferente a la de ellas, es decir, siempre me sentaba en el mismo circulo en que ellas se sentaban y cada día alternaba mi sitio.

El hecho de hablar con ellas (el primer día) y que me dijesen en que creían que “fallaban más” o que les resultaba más difícil del español, cuando salían a la calle me resultó realmente útil. En pocos días cogimos muchísima confianza y eso nos permitió avanzar en los diferentes aprendizajes. La gramática, lectura y escritura es importante, pero en un principio decidí centrarme en que supiesen desenvolverse en situaciones cotidianas, como: ir al médico (saber qué tipos de médico había, como pedir cita, como ir a urgencias…), hablar con los profesores de sus hijos e hijas o ir a la compra. Para ésto último hice uso del teatro como medio de adquisición de conocimientos y fue muy eficaz para que entendiesen e interiorizasen mejor los conceptos.

He descubierto que ésta cultura no es en absoluto lo que nos cuentan y que la fortaleza de estas mujeres es tal, que saltan cualquier barrera con tal de superarse. Es muy duro ver la realidad en la que vive la mayoría, pero cuando se cierra la puerta de la clase y el ambiente se vuelve cálido y familiar, se relajan, hablan de lo que quieren sin miedo a ser juzgada y muestran su interés por aprenderlo todo. La mayoría van a clase con sus hijos (si estos son menores de tres años), con lo que has de estar pendiente de ellas y de entretener a los niños (con actividades lúdicas y de aprendizaje) para que las madres pudiesen aprender y atender, sin estar pendientes de los niños.


(Grupo reducido durante la clase de español)

Sin duda, la motivación (además de la confianza) es el componente principal para que todo fluya, pues los aprendizajes son muy lentos y los resultados se van viendo muy a poco a poco, con lo que hay que persistir y mostrar lo listas que son y el esfuerzo que hacen en cada momento. Hemos de tener en cuenta que éstas mujeres llevan (la mayoría) viviendo en España más de diez años y que en ese tiempo no han sabido hablar y entender nada de español, y las limitaciones y aislamiento que ello ha conllevado ya que tareas tan simples como leer una carta, encontrar una calle, salir fuera de casa o hacer la compra (solas) les ha sido imposible. Las mujeres de mayor edad me contaban que en Marruecos no pudieron ir a la escuela porque las personas que vivían en los pueblos debían caminar horas para llegar a estas y que se quedaban en su casa haciendo las tareas del hogar, con lo que hay muchas que son analfabetas en su propia lengua.

Su generosidad y respeto está siempre presente. Cuando comienzan las clases nos damos tres besos y los buenos días y cuando terminan nos agarramos todas y nos damos las gracias por haber ido y por habernos escuchado, pues la escucha está siempre presente y en el momento en que alguna parece que se queda “atrás” es ayudada entre todas.


El pasado viernes doce de Mayo las entregué oficialmente los diplomas (junto con las otras monitoras que hicieron lo mismo con sus grupos),  y cuando subieron al escenario a recogerlos, me agarraron con fuerza como si ese vínculo que habíamos formado día a día estuviese a punto de romperse, y sinceramente me sentí desorientada al pensar que tan solo queda una clase, la última en la que veré a las que han sido mi familia en estos últimos meses.


                                                            (Fotografía tomada el día de la entrega de diplomas)

Os aseguro que aunque os parezca exagerado, me han dado una gran lección de vida y es que por lo general los europeos nos consideramos las personas más íntegras y cabales cuando no es así. Me han enseñado que cuando menos tienes más valoras la vida y tienes  más capacidad de empatía y de amor hacia todo. Me han enseñado que el mejor regalo es entregar tu tiempo a alguien que te valora y te hace feliz, como ellas, y que por desgracia (en este caso) una sola de estas mujeres es capaz de hacer en un solo día una cantidad de cosas impensables para nosotros.

(Acto en el Parque del Retiro llevado a cabo por la alcaldesa de Madrid, sobre ApS)

(Ponencias de los profesores de las universidades de la Comunidad de Madrid en el Parque el Retiro, hablando del proyecto ApS)

Lo más curioso es que su cultura, a la que tanto se critica en Europa, no dista tanto de la nuestra y que costumbres como el Ramadán sería un equivalente a nuestras navidades o que hay muchas similitudes entre “su dios” y el nuestro. Por otro lado, hemos hecho varios debates sobre temas diversos y con respecto a la igualdad, ellas me preguntaron: “¿Es igualdad que aquí en España los maridos asesinen a sus mujeres y no se tomen medida más duras? o ¿Es igualdad que las mujeres que vistan con ropa corta sean perseguidas y silbadas en la calle? y ¿Es igualdad que si estás embarazada puedan no contratarte o echarte a la calle? ¿Es igualdad que tenga que quitarme el pañuelo si yo quiero llevarlo?” Todo esto me hizo darme cuenta de la razón que llevan y de que nuestra prepotencia nos ha llevado a pensar de manera irrefrenable que todos han de imitarnos, por ser un país subdesarrollado en vez de tratar de cambiar este tipo de situaciones.
  
Y antes de finalizar he de poner de manifiesto mi cabreo e indignación ante un suceso desagradable que ocurrió durante una de las últimas excursiones realizadas este año, en la que se fue a uno de los parques de Madrid. Resultó que la persona encargada de dejar pasar a la gente dentro de dicho parque, no solo puso impedimentos en un principio (al ver que más de cincuenta mujeres con pañuelo y con sus hijos iban allí de excursión) sino que además, una vez dentro (las mujeres) llamó a la policía sin motivo alguno. Este tipo de situaciones ocurre a menudo, con lo que no comprendo que presumamos de ser “modernos” y “desarrollados”, cuando hay personas que se siguen creyendo más que otras por nacer en un lugar u otro.


Puede resultar anecdótico pero los Lunes y Miércoles (días en que estaba con ellas), mis sueños eran muy similares, tranquilizadores y reveladores. Era como si la continuidad no desapareciese nunca y es que realmente así es, las tengo en mi mente constantemente. Las conté lo que hacíamos con los talleres de sueños en la universidad y las pareció algo fascinante pues, ellas no consideran que los sueños solo sean eso, sino que todo está relacionado y que hay que buscarle un por qué a cada cosa que ocurra en ellos.

Finalmente os diré que dos compañeros y yo presentaremos en las Jornadas Doctorales este proyecto y que estáis invitados a saber más sobre él, y hacer las preguntas que queráis, éstas se celebrarán la última semana de Mayo.
Una vez más gracias por leernos y espero que os haya gustado esta entrada.

Cristina Díaz Pescador








martes, 9 de mayo de 2017

HOY EN EMOCIONARTE! ...LOS DIBUJOS DE SARA

Muy buenas, mis queridos emocionartes! Hoy os traemos una colección de dibujos de mi prima Sara, quien es toda una artista.

En esta serie imágenes os voy a hablar de la representación de la figura humana entre los 7 y los 12 años, que es de gran interés ya que se considera el tema de dibujo más frecuente en todas las edades y se han realizado numerosos estudios psicológicos a partir de ellas.

Para la mayoría de nosotros el renacuajo (círculo con extremidades) es la primera figura humana que dibujan los niños, pero esto es erróneo, en realidad es el círculo ya que marca el inicio de la diferenciación entre el “yo” y el entorno que nos rodea en el papel.

Estos dibujos comienzan a la edad de siete años, y Sara ya es capaz de dibujar personas con mayor detalle, pero debemos destacar que hasta los 8 años los dibujos de personas son más rígidos, los brazos pegados al tronco y las figuras rectas.

A partir de esta etapa destaca el movimiento de las figuras y las formas, un ejemplo es la flexión de los brazos y las piernas en los dibujos, aunque a lo largo de la exposición nos daremos cuenta de que en ningún momento llega a ser capaz de dibujar personas de perfil.

A los 10 años, Sara aporta mayor realismo en los dibujos con sus padres, dotándolos de las características físicas que cada uno posee, como por ejemplo el pelo y la altura. Es en esta época cuando la evolución de sus dibujos se verá sujeta a la expresividad del niño.

7 años

8 años

9 años


10 años

11-12 años





Patricia Rodríguez Segura

Hasta pronto emocionArte

¡Buenos días mis queridos emocionArtes! La asignatura se acaba aquí. Creó que no soy la unica que ayer, en la última clase de Educación...